PENE DE ACERO. ¡Una crema y CRECE COMO BOTES!

¿No quieres ser un cojo que se avergüenza de quitarse los pantalones delante de una chica recién llegada de Internet? Puede que seas bueno hablando, inteligente y educado, pero todas las chicas son iguales, todas quieren un gran tornillo para saltar sin parar. Lo siento, así es el siglo XXI

Yo era un perdedor, mis amigos me llamaban „relleno” y me llamaban: ¡„Virgen de 20 años”! ¡Ahora sólo cojo a los mejores y están celosos de mí!

Mi historía

1) El virgen vergonzoso

Con esta „vergüenza”, no sé si exageré. Siempre fui el alma de la compañía y tenía muchos amigos. El problema estaba en la relación con las mujeres. Sabía que no tenía remedio en esta esfera. Tenía una polla pequeña, y cuando se paró ahí, voló hacia la izquierda, de alguna manera extraña. Sabía que sólo me ridiculizarían si arrastraba a una chica a la cama. Estaba asustado y avergonzado, no quería que ella le dijera a toda la finca más tarde que tenía un cabano en mis pantalones.

2) Mi primera vez

Hace tres años conocí a una gran chica. Era encantadora, amable y educada. No tenía prisa por tener sexo porque tenía un poco de experiencia en la cama. Después de seis meses de reunión, finalmente sucedió. Sabía que yo era virgen y lo respetaba, era amable. Cuando llegamos hasta el final, vi su sorpresa después de quitarme los calzoncillos. Estaba sorprendida, decepcionada, incluso conmocionada. Cuando lo vi, literalmente todo se cayó y el primer intento de destrozarme terminó en una total vergüenza. No podía mirarla a los ojos.

Unos días después de eso, mi novia decidió intentarlo de nuevo. Cuando finalmente - por primera vez en su vida - mi polla sintió el calor de un joven coño, disparó inmediatamente y ella no consiguió sentir nada. Los amigos tenían razón, yo tenía cien años y un pene pequeño.

Me separé de Cristina unos meses más tarde, cuando resultó ser un trapo ordinario y se movía a un lado. No estoy realmente sorprendido... ¿por qué me haría el amor cuando ni siquiera sentía que yo estaba dentro? Me derrumbé, tuve un problema serio, pensé que me dispararía en la cabeza por todo esto. Fue la peor época de mi vida. Mi primer amor me dejó porque tenía una polla como la de un niño de diez años.

3) Intentos de aceptación

Vale, sé que es divertido, pero no vi otra salida. Mi situación era desesperada. Si no tienes una bicho en tus pantalones, no lo entenderás. Fui a un psicólogo para ayudarme a lidiar con mi complejo. Sí. Lloré en el marco de tu psicólogo que era una onda suave y por eso una chica me dejó. Estaría jodido para el resto de mi vida si uno de mis compañeros se enterara.

„"Hay cosas sobre las que no tenemos control. Todo lo que podemos hacer es aceptarlos.”

El consejo de oro del psicólogo, ya estoy mejor. No sé si alguno de ustedes puede aceptar el hecho de que no follará por el resto de su vida. Yo no pude, empecé a buscar alternativas.

4. Encuentros sexuales en Internet

Mi objetivo era uno, quería follar. Soy un tipo normal, tengo mis necesidades. Internet es genial, podría enviar una foto del chupavergas antes de la reunión, si uno quisiera, nos encontraríamos si no - normalmente no respondía y ya está. Incluso me gustaban las quietas, que llegaban a la conclusión de que : no hay nada aquí para mí, y me ignoraban. Peor fueron los exigentes y burlones cabronas que me escribieron:

No puedo quejar - Ha habido pequeñas fanáticas de los penes. A la gente le gustan las cosas, así que tuve la oportunidad de hincharme. Pero te ruego - respetemos a los demás, no me gustan las viejas con tetas caídas, y sobre todo las que querían salir conmigo. Me las arreglé para salir con alguien bastante bien unas cuantas veces, pero ninguna de ellas cumplió completamente mis expectativas.

5. Foro de Hombres

Normalmente no lo habría sospechado, pero me rompió el corazón y busqué ayuda de todas las fuentes. Me encontré con un foro para hombres. Era un verdadero festival de la desilusión: viejos cachondos intercambiando números con chicas fáciles, o chicos jóvenes con mucho peso publicando fotos de sus pechos. Decidí intentarlo... después de todo, yo era anónimo allí. Pregunté si sabían alguna forma de agrandar mi pecho. Alguien me recomendó una crema, decidí probarla y la pedí.

6. Follando cuando me apetece

Empecé a lubricarme con esta crema dos veces al día. Ya después de los dos primeros días sentí que algo estaba pasando. Un ligero hormigueo en el pene, un mayor deseo de sexo. Mi líbido saltó como una loca. Me sentí como si me tirara a todos los que conocí en mi camino. Pero eso no es lo más importante, después de todo, no era mi libido el problema. Una semana después, encontré un video para adultos en Internet. Mi polla se hinchó al instante y se puso de pie, era dura como el acero y tan grande que apenas cabía en una mano. Fue algo - inmediatamente tomé una foto y la subí al portal donde previamente había buscado amantes. La respuesta fue increíble, las cerdas calientes me enviaron sus fotos desnudas de ellas mismas flexionándose frente al espejo. Uno mejor que el otro. Ya lo sabía... podría follarme a cualquiera de ellos.

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Estoy escribiendo sobre ello porque sé cómo he estado sufriendo por el pequeño pene. Decidí compartir mi camino hacia una enorme polla y una erección de acero siempre que quisiera. Con BangSize tendrás un pene más grande, más duro y más rígido que satisfará a todo el mundo.

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